5 de junio: Dia mundial del Medio Ambiente
Cuando hablamos de Medio Ambiente solemos pensar en el Conservacionismo militancia verde y otras tendencias que tradicionalmente solemos oponer a la actividad económica, a la rentabilidad, y al progreso… Nada podría estar más alejado de la verdad. Todos entendemos qué es el Medio Ambiente? El Medio Ambiente es la estrecha conexión de la vida en sus múltiples y diversas formas con su entorno, ya sea los mares, las selvas, los grupos humanos, etc.
Ninguna forma de vida es autónoma, indiferente a lo que la rodea, sino que tiene un continuo ejercicio de consumo y de liberación de recursos: Se toma lo necesario para vivir y se desecha lo que no se usa.
Los seres vivos de la Naturaleza se ven forzados a tomar parte de un ciclo: nacer, crecer, reproducirse, morir. Ninguna especie, SALVO EL HOMBRE, consume más de lo que requiere para ocupar su eslabón temporal en la cadena. Nuestra relación con el Medio Ambiente se ha hecho problemática a medida que hemos malentendido las leyes de la naturaleza. Ya no sólo queremos preservar nuestra existencia, esparcir nuestros genes, sino también queremos construir el conocimiento futuro, alargar nuestra vida individual, y dar con un sistema que nos garantice una existencia saludable… Estas aspiraciones han transformado al mundo de manera irreversible de la mano de la industria, del consumo desmedido, y de la aparición de políticas destructivas que a menudo nos ponen en peligro y que a corto plazo se cobrará en nuestra propia calidad de vida.
Estamos atrapados: nuestra especie empobrece la vida de otros seres vivos y de las generaciones futuras. Todo esto a cambio de recursos inmediatos que respondan a nuestras aspiraciones y que no son sostenibles en el tiempo. El precio es muy alto, no nos dan la felicidad ni aportan soluciones a los males globales.
La preservación del Medio Ambiente debe ser una prioridad humana. El estado, las organizaciones privadas, y la misma ciudadanía deben establecer una relación armónica con el Medio Ambiente. Las calles de las ciudades deben ofrecer los beneficios del arbolado urbano, más allá que los intereses económicos determinen su extracción y/o mutilación (llámense frentes y/o carteles). La ciudad debe proteger los espacios verdes que comparten sus habitantes. Sus residuos deben ser tratados y retornados al ecosistema para cumplir diferentes ciclos. La población debe estar ordenada sanitariamente (de tal manera que no existan conexiones de cloacas a los desagües pluviales ni aguas que no sean potables ni atmósferas contaminadas con humos). Las industrias contaminantes deben ser controladas para evitar riesgos en la población, los grupos habitacionales deben responder a normas preestablecidas por planes urbanísticos. Por nuestra calidad de vida tratemos de vivir de forma sostenible… evitemos que nuestros malos hábitos dañen a otras personas y al Medio Ambiente.
Sólo siendo conscientes de nuestras acciones podremos modificar nuestras conductas.
(María Nélida Domínguez)
