El paro tuvo alto acatamiento y ya anticipan más medidas; fuertes cruces entre gremialistas y el gobierno
-“Si nos atacan, nos vamos a defender”, advirtió el ferroviario Omar Maturano, de La Fraternidad. El impacto de la medida de fuerza se sintó más en el AMBA que en el interior
El paro de transportes se cumplió con un alto nivel de acatamiento, en una jornada que incluyó a los colegios bonaerenses y las universidades, además de la realización de 500 ollas populares y cortes de calles por parte de organizaciones sociales. El gobierno respondió con ironías y críticas y planteó que las medidas de fuerza se explican por el interés de los dirigentes sindicales de mantener sus privilegios, contra los intereses de los trabajadores.
Cerca de las 15, en una conferencia de prensa en la sede de la CGT, los dirigentes que impulsaron el paro señalaron que el acatamiento en el sector transportes (FFCC, Camiones; Fluviales y Taxis) fue total y además criticaron la decisión de no adherir de los colectiveros de la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
“Si nos atacan, nos vamos a defender”, advirtió el ferroviario Omar Maturano en contacto con la prensa. A su lado, Pablo Moyano, de camioneros e integrante del triunvirato de mando de la CGT, añadió: “Los que nos cagaron fueron los diputados, la clase política, que fueron los que votaron para que vuelva el impuesto a las ganancias, los que le cagaron el aumento a los jubilados y los que votaron la Ley Bases”.
“Fue de 100% en los gremios que paramos”, dijo el camionero Pablo Moyano, respecto del acatamiento que tuvo la medida de fuerza. La protesta, que duró hasta la medianoche y que es “en contra del ajuste de Javier Milei”, tiene su foco en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), donde complicó a miles de usuarios que tuvieron dificultades y demoras para llegar a sus puestos de trabajo al estar paralizado el servicio de trenes y subtes.
En el interior del país, en cambio, la medida se sintió menos, aunque el paro casi total en el sector aeronáutico limitó la conectividad y no hubo actividad en los aeropuertos.
Además, condicionó la circulación de la gente los diferentes cortes que activaron los piqueteros identificados con la izquierda y el kirchnerismo, quienes activaron cortes y protestas en los accesos a la Ciudad de Buenos Aires. Hubo algunos incidentes con la policía, pero en ningún momento se cortó por completo la circulación de los vehículos.
También hubo incidentes en Villa Celina, en La Matanza, frente a una sede de la compañía Mercado Libre. Manifestantes de la UTEP se habían congregado frente al centro de distribución de la firma de Marcos Galperín (lindero al que la semana pasada multó la Municipalidad de La Matanza con la suspensión de una obra) e intentaron prender fuego neumáticos frente a la entrada. Antes de que pudieran encenderlos, la Gendarmería avanzó sobre la columna y retiró los neumáticos.
Hugo “Cachorro” Godoy, de la CTA Autónoma, representante de trabajadores estatales, lamentó en declaraciones radiales que “una parte de la UTA” no haya adherido al paro, pero aclaró que “no es el único sindicato que representa a los trabajadores del sector”. Godoy resaltó que “es mentira lo que dice el gobierno nacional acerca de que hay una mejora del ingreso de los trabajadores y las trabajadoras formales”. Por ello, convocó a “ponerle freno a este saqueo de los bolsillos del pueblo argentino”.
-La respuesta de Gobierno
Fiel a su sello personal y su inagotable “batalla cultural”, el presidente Javier Milei disparó toda su artillería en las últimas horas con reposteos varios en X en contra del paro de transporte que se desarrolló este miércoles en el país y apuntó contra los “laburantes sindicalistas”, en especial contra Pablo Moyano, Néstor Segovia y Pablo Biró, a quienes tildó, a través de retweets, de “manga de chorros”.
Por su parte, el secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta, también se puso al frente de la escalada libertaria contra los líderes gremiales y sostuvo que “estos dirigentes dejan a los trabajadores a pie y sin la posibilidad de salir a trabajar y ganarse el mango”. Mogetta afirmó en declaraciones radiales que “es una de las prácticas habituales de esta gente, a través del apriete seguir sumando sindicatos”.
“Estos son los dirigentes que hablan de defender trabajadores dejándolos a pie, maltratándolos y no dándoles la posibilidad de salir a trabajar para ganarse el mango día a día”, apuntó. Y agregó: “La huelga normalmente busca dañar a quien debe dar respuesta ante el reclamo pero acá no hay ni siquiera reclamo, es un paro político. Esto es un boicot al Estado de 150 millones de dólares”.
Sobre la presencia de Pablo Moyano en la organización del paro, el funcionario dijo: “También se plegó a la marcha universitaria. No tienen nada que ver. No es un paro de transporte, no es ni siquiera un paro, es un boicot”.
“Mientras los jinetes del atraso, los pilotos de un tren fantasma, que son estos sindicalistas, hacen estas medidas que son del siglo pasado, porque tienen cabeza del siglo pasado. Mientras todo eso sucede, también está la Argentina que está despegando”, finalizó Mogetta. (DIB)