– Por Gonzalo Ciparelli

¿Con qué derecho la sensación de vacío viene a interponerse en medio de la abundancia?
¿Acaso es el miedo a perderlo todo?
Y si así fuera, ¿no es a través de las adversidades que se adquiere la fuerza para levantarse y volver a empezar?
Como la reconocida frase donde en ella se refleja un futuro incierto, opuesto al presente: las veces que he sido feliz he tenido profundo miedo, ¿como iba a pagar la factura? Solo los insensatos son felices sin temor.
Hay mentiras y sinceridades esparcidas mezclándose allá afuera.
Cada uno puede intentar elegir cuál diariamente mostrar.
Sabiendo que hay extremos y moderaciones.
En las primeras hay tentación y malestar. En las segundas, hay bienestar pero son las más difíciles de lograr.
El ser humano es tan libre, que hasta puede elegir su propia esclavitud.
Trabajar el inconsciente, para hacerlo consciente quizá es lo que te da las herramientas para poderte liberar.

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