Autenticidad-Por Gonzalo Ciparelli
Van tomando forma las palabras que se mezclan en un principio y que parecen no encontrar un orden.
Van tomando forma los pensamientos que viajan a gran velocidad, pero buscando ser ordenados y escuchados.
Esto causan los paisajes naturales cada vez que me adentro en ellos y me escapo por un momento de la rutina y de la zona de confort, que en realidad de confort poco o nada tiene.
No haga favores esperando una devolución. Eso es negocio, y está claro, en el negocio actúa la cabeza y no el corazón.
No sea solidario para obtener un reconocimiento a cambio. Eso es interés, y lo está haciendo más por oportunista que por empatía.
No utilice la generosidad para llamar la atención y ser aceptado. Eso es falsedad, y como en las anteriores, está actuando por interés.
No actúe como le gustaría que los demás actúen si no está preparado para entender que pueden luego actuar diferente. Puede conducirlo a la desilusión.
El ser humano tiene la gran capacidad para mentirle a los demás y que estos le crean. Sin embargo, jamás podrá conseguir mentirse a sí mismo por más que se quiera imponer una verdad que no es. Ruidos internos harán su trabajo para recordarle que no es posible.
Si tiene valor, actúe como realmente es. Eso le dará autenticidad. Lo alaben, lo odien o lo amen. Ahora, recuerde que no podrá quejarse cuando los demás actúen también con autenticidad. Deberá aceptarlo sin más.
Por otro lado, si no tiene el valor o desea ser como alguien más y aceptado por todos, actúe buscando reconocimiento e interés por medio de la falsedad. Podrá quejarse, podrá hablar, pero no podrá lograr la placentera sensación de ser uno mismo, aunque esto lo pueda conducir a su propio cielo o infierno.