Día de la Mujer: La trayectoria de la periodista Adriana Ferrari

La reconocida periodista local, Adriana Ferrari compartió su trayectoria en los medios. También nos comentó sobre el rol de la mujer en el mundo del periodismo.

¿Cómo fueron tus inicios en el mundo del periodismo?
Mientras estudiaba en el secundario no imaginaba que podría ser periodista. Al egresar continué en la Escuela Normal la carrera de Profesorado en enseñanza primaria. Me recibí y tenía ganas de aprender algo más, por lo que me anoté en varios cursos que se ofrecían, uno de ellos Periodismo. Se dictaba en la Escuela de Artes y duraba 3 años. Mientras lo iba haciendo me di cuenta que me interesaba mucho. Así fue que me presenté en Radiodifusora Santa Rosa, cuyo creador y propietario era Víctor Giannoni y le pedí trabajo. Me preguntó qué quería hacer, le dije «noticias» y me respondió «Bueno, vení a probar». Justo en ese momento el jefe del noticiero, Eduardo Bercovich, había pedido que alguien lo ayudara. Y así empecé a familiarizarme con el mundo del periodismo. Ahí también tuve una experiencia gráfica con la revista «Realidades», luego con el semanario «Hechos y gente» y posteriormente en el canal local de TV, donde trabajé 37 años.

-Cuando empecé a trabajar en los medios venía con formación docente, eso me daba la perspectiva de colaborar con la educación desde otro lugar que no fuera un aula. Ahora ya no me dirigía a alumnos, sino a un público masivo al que no veía y quizás no conocía, pero igualmente sentía que a través de las informaciones o del modo de comunicar, podía aportar al conocimiento de muchos temas, que sería útil para los demás. Esa podría ser una respuesta, aunque hay muchas, como la posibilidad de canalizar inquietudes, ayudar a resolver algún problema, ser el nexo entre el vecino y las autoridades. Ver que contribuí a cambiar algo, aunque no sea tan grande como el mundo (que sería una utopía), pero por mínimo que fuera, lo sentí como un logro. Y en lo personal, un poco vanidoso, pero disfruté de la posibilidad de acercarme a gente que yo admiraba, como artistas o líderes importantes.

¿Siempre has trabajado en la televisión? ¿Qué destacas luego de tantos años frente a la cámara?
-Me incursioné en casi todos los géneros periodísticos, aunque la televisión fue el más importante. Estar tantos años en cámara me llevó a ser conocida por varias generaciones, me dio la posibilidad de estar en las casas bragadenses cada día y de sentir que perdía una parte de mí cuando llegó mi último informativo. No todo fue color de rosa, hubo espinas también, por supuesto. No es gratis exponerse y dar a conocer lo que uno piensa, pero en el balance final decidí restarle importancia a los sinsabores y valorar lo inmensamente positivo que he cosechado. Me siento feliz y orgullosa de haber sido coherente con mi pensamiento y de haber actuado siempre con honestidad intelectual.

¿Cómo crees que tu rol de mujer influyó en la actividad que llevaste adelante?
-Siempre pensé que no debe haber diferencias entre mujeres y varones. Y la verdad es que yo no las sentí en el plano laboral. Tuve la oportunidad de ocupar un rol destacado en la comunicación y considero que lo logré por mi dedicación, responsabilidad y ganas de mejorar, capacitándome cada vez que tuve la posibilidad. Era una época donde no se debatía como hoy la necesidad de equiparar derechos y no sé si mi rol contribuyó a que haya más mujeres en la profesión porque somos muy pocas en Bragado, en el periodismo local predominan ampliamente los hombres. En cada ocasión que tengo, abogo para que esto cambie.
-Si bien no hubo un planteo explícito sobre el rol de la mujer en la sociedad, considero también que de hecho mi lugar, tan visible, contribuyó a que se naturalice que no había diferencias de género para ejercer cualquier profesión. Y por supuesto, creo que fue importante tener una voz femenina ante un público tan numeroso.

-Con todos los cambios que estamos transitando como sociedad, ¿qué mirada tenés de la mujer en estos tiempos?
Las mujeres hemos tenido que rendir examen permanentemente hasta que se entendió que tenemos el mismo potencial. Es importante no desaprovechar cada oportunidad que se nos presenta para hacer valer nuestras capacidades. Yo lo hice, sin pensar que debía esforzarme más por ser mujer, sino aprendiendo cada día para tener seguridad y convicción. En estos tiempos, las mujeres pudimos saber más de nuestros derechos y defenderlos. Hay otra mirada, otra posición política que acompaña esos cambios. Falta todavía, la violencia machista y los femicidios no bajan y es ahí donde se debe seguir trabajando. Tenemos que «deconstruirnos» varones y mujeres, entender que no hay un género superior al otro, que en la familia todos debemos colaborar de igual manera, que la educación para niñas y niños no es diferente. Muchos hombres lo han comprendido y acompañan, mientras que todavía les cuesta a otros y otras. Ahí tenemos que jugar un papel importante desde la comunicación. Como dije al principio, para mí el periodismo estuvo siempre ligado a la educación. Y esa es la carta más fuerte para seguir avanzando.

Comentarios
Compartir en: